El expolítico Alberto Ruiz-Gallardón ha participado
en una mesa redonda del curso ‘España y Monarquía’, enmarcado en los Cursos de Verano CEU-María Cristina (San Lorenzo de El Escorial). Un encuentro
presentado por la directora de la Cátedra Elcano de Historia y Cultura Naval, María
Saavedra, y en el que ha estado acompañado por el director del Real Instituto
Elcano, Charles T. Powell.
El exministro ha afirmado que “la Monarquía, en la situación que
vivimos en España, no es una conveniencia, es una necesidad”. Y ha añadido que
“la alternativa en España a una Monarquía no es una República, sino la
desaparición de España”.
Durante su intervención, Gallardón se ha referido al intento
de golpe separatista perpetrado en Cataluña en 2017 y a la actuación del Rey,
que dirigió un mensaje a los españoles por televisión la noche del 3 de octubre
de ese año, con el que paró ese golpe. “Creo que la recuperación de esa
tranquilidad y confianza no hubiese sido posible sin la intervención de la
Corona, y no hubiese sido posible si, en la Jefatura del Estado, en lugar de
haber tenido un Rey, hubiésemos tenido un presidente de la República, parte de
una ideología, de una clase social, de un territorio o de un interés político”,
ha afirmado.
Gallardón también ha desmontado las acusaciones de que la
Monarquía de don Juan Carlos tuviera su origen en Franco, y ha explicado que la
restauración de la Monarquía en 1975, en realidad, supuso la recuperación de
“la normalidad que había sido interrumpida el 14 de abril de 1931”. El abogado
ha explicado que la propia Constitución de 1978 reconoce a don Juan Carlos como
legítimo heredero de la Dinastía histórica, y no de Franco. “Franco solo pudo
haber elegido a dos personas: Juan Carlos o su padre”, porque eran los únicos
que tenían legitimación.
Además, el expresidente de la Comunidad de Madrid ha
apuntado que el 18 de julio de 1936 hubo un golpe de Estado en España, pero “el
14 de abril de 1931 también hubo un golpe de Estado porque se sustituyó el
régimen monárquico por el republicano sin participación de las Cortes
Generales, sin someterlo a referéndum y sin recurrir al mecanismo previsto en
la Constitución de 1876 para sustituir la Jefatura del Estado de forma
monárquica a republicana”.
Presente
y el pasado de la monarquía española
Durante la jornada inaugural de este curso, Alberto Aza,
exjefe de la Casa Real entre 2002 y 2014, ha explicado
la oportunidad y novedad histórica del reinado de Juan Carlos I. Ha sido
inevitable la referencia a la Transición española, de la que ha destacado que
el caso español ha sido único en el mundo al recuperar el sistema monárquico:
"Algo insólito, que no se ha producido en ningún sitio más. Tras dos
dictaduras, una república, una guerra civil, que en ningún caso se
consolidaron, en democracia se da un periodo de estabilidad y prosperidad cuyo
protagonista es Juan Carlos I", ha explicado.
Adentrándose en el desarrollo del sistema de la monarquía
parlamentaria en España, Aza ha explicado que la monarquía tuvo que reformarse
internamente, desplazando el foco del poder de la persona del rey a las
instituciones, lo que fue esencial para estructurar la nueva disciplina
democrática. Al mismo tiempo Juan Carlos I desarrolló la función moderadora de
la monarquía, "por la que se acercan los puntos de vista del Ejecutivo y
de otros estamentos sociales que el rey conoce por haber desarrollado unos
escenarios de confianza en el ámbito de las audiencias privadas y
reservadas".
Aza ha destacado el papel fundamental de la función moderadora
en tres momentos críticos: la “matanza” de Atocha de 1977, el 23F y los
atentados del 11M. En estos tres momentos, ha apuntado, "el rey mantuvo el
punto de moderación y mantuvo el principio del funcionamiento correcto de las
instituciones. El rey consolidó su valor, su utilidad, su funcionalidad y su
capacidad de resolver y restaurar la normalidad".
En cuanto al futuro de la monarquía en España, el exjefe de
la Casa Real ha mencionado la importancia de mantener la independencia y la
neutralidad de la institución para asegurar su futuro a largo plazo. También ha
destacado que la lealtad y el respeto a los principios constitucionales son
esenciales para la continuidad de la institución. Al mismo tiempo ha
recomendado evitar su politización para mantener su legitimidad.
Catedráticos como Rafael Sánchez Saus (Universidad de
Cádiz), María Ángeles Pérez Samper (Universidad de Barcelona), Carlos
Dardé (Universidad de Cantabria) y expolíticos como Juan José Laborda
(expresidente del Senado) y José Manuel Otero Novas (exministro de la
Presidencia y de Educación) han abordado también en esta primera jornada el
papel de la monarquía y su evolución en España.