Imagen demo
Logo Universidad CEU San Pablo
Sala de prensa
Noticia
Noticias

Las olas de calor pueden causar mal humor e impulsividad

15/07/2022
Imagen de la noticia

Este año las olas de calor se han adelantado, lo normal es que lleguen en julio, pero ya hemos enfrentado una en junio y otra en la primera quincena de este mes. Y no solo se han adelantado, sino que han durado más días de lo habitual. El profesor del Grado en Psicología Fernando Miralles explica que la mayoría de las personas sienten cansancio y apatía durante estas fechas de notable calor. Hay personas denominadas meteorosensibles que, además de lo que viven la mayoría con el calor, agotamiento y desgana, pueden llegar a sentirse malhumoradas.

El doctor Miralles señala que, cuando además del calor existe humedad y viento caliente, los efectos negativos en la conducta aumentan. “Esto se ve reflejado en una mayor falta de atención, un carácter más impaciente e impulsivo y mal humor”, subraya el psicólogo.

Las olas de calor como las que estamos viviendo provocan que las personas sufran vasodilatación, sudoración abundante, pérdida de líquidos y electrolitos a través de la piel, falta de sueño y, en algunas ocasiones, casi nulo descanso. Sin embargo, al haber más horas de luz, cuando el calor es limitado y las condiciones atmosféricas no son adversas, el verano es la época del año en la que nuestro estado de ánimo es mejor, nos volvemos más extrovertidos y tolerantes. El doctor Miralles comenta el efecto de las distintas estaciones del año y explica que “las personas meteorosensibles pueden sentirse en otoño e invierno deprimidas por la falta de luz, mientras que en primavera y verano se encuentran más activas y alegres”.

 

El calor y la luz afectan el estado de ánimo

El doctor comenta que “podemos comprobar cómo al salir de trabajar en verano con la luz del día, la sensación de alegría aumenta. En el invierno ocurre lo contrario, cuando entramos o salimos de trabajar y no hay luz solar, las personas se sienten menos activas y más alegres”.

Miralles comenta que “en verano las personas meteorosensibles deberían tener cuidado con los efectos negativos que ocasionan las altas temperaturas, cuidarse y, si lo ven necesario, acudir a un centro de Psicología Clínica, donde les enseñarán técnicas para disminuir la ansiedad y ser más conscientes de sus cambios conductuales”.

Comer alimentos con pocas calorías, no ingerir alcohol, descansar más horas de las normales (en especial en las horas de más calor) y echarse la siesta, reducir drásticamente la actividad física, usar ropas de ligeras y, sobra todo, no exponerse directamente al sol y beber muchos líquidos.

Palabras clave Meteorosensibilidad Calor Cansancio Apatía Irritabilidad Verano