En definitiva, para elegir bien vuestro futuro profesional debéis ser capaces de reconocer vuestros conocimientos, capacidades y actitudes.
Y ¿Por qué es tan importante conocerse bien? Porque si tomáis decisiones sin conoceros bien puede que toméis decisiones equivocadas.
Ahora mismo, si os paráis a pensar, académicamente solo se os pide una cosa. ¿Sabéis cuál es?
¡Que aprendáis!
Un buen día, empezareis a trabajar, en ese momento no solo se esperará de vosotros que hayáis aprendido, que hayáis adquirido los conocimientos propios de esa área profesional, sino que seáis capaces de hacer. Esto significa que ya no seréis estudiantes de medicina, serás médicos. Dejaréis de ser estudiantes de economía para ser economistas. No seréis estudiantes de derecho. Seréis abogados. Una manera de hacer integral, en la que tu dejas de ser el centro y lo pasa a ser tu “cliente”, poniendo vuestros conocimientos, capacidades y actitud al servicio de otro.
Por eso es importante preguntarse quién somos, qué podemos ofrecer a los demás y si estamos dispuestos a darlo todo para conseguirlo.
Herramientas para orientarte
- Ventana de Johari.
- Ejercicio DAFO.
- Hablar con vuestro orientador del colegio. Seguro que puede ayudaros.
- Hacer un buen test de orientación. Nosotros os proponemos uno que hemos desarrollado especialmente siguiendo estos pasos y fijándonos en los tres elementos clave: conocimientos, capacidades y actitudes.